Aprovechando la ventaja de tener el fotomultiplicador en funcionamiento por sugerencia de Boticario-Tux de DTForuM y basándome en algunos documentos que encontré y que pueden ver al final, he realizado esta interesante prueba.
La experiencia que sugiere uno de los documentos es con animales vivos, específicamente ratas de laboratorio, se duerme al animal y se abre su abdomen dejando expuesto el hígado, el roedor debe estar canalizado para poder inyectar el fármaco que se pone a prueba.
Como bien sabemos el hígado es el laboratorio del organismo y allí van a metabolizarse todos los medicamentos, el fenómeno de emisión de fotones se presenta cuando la toxicidad es suficiente para destruir células, por ejemplo se inyecta tetracloruro de carbono (Cl4C) y a medida que hay muerte celular se va incrementando la cuenta de fotones por minuto. La presencia de esa luminiscencia parece ser provocada por la oxidación lenta del fósforo que formaría un óxido en estado excitado (Bibliografía: Fisicoquímica Autor Gilbert W. Castellan)
Bueno, para no ser escrachado después, no he sacrificado ninguna rata, he conseguido un pulmón de una vaquillona recién faenada y me lo he traído al laboratorio, hice dos conteos basales, colocando un trozo del tejido en contacto directo con el PMT y la tasa de cuentas por minuto me dio 0 (cero) en ambas medidas, luego bañe el tejido en una solución de soda cáustica y volví a tomar medidas, encontrando una tasa de unas 120 cuentas por minuto.
El trozo de pulmón en la cápsula de petri
En el "montacargas" del recinto oscuro del fotomultiplicador
Comparando con el trabajo con la rata "in vivo", la tasa debió ser muy superior (como unas 10 veces mas), sin embargo se debe tener en cuenta que el tejido tardó en llegar al laboratorio y la prueba se realizó casi 5 horas después que se había dado muerte al animal, también hubiera sido interesante hacer la prueba con el Cl4C que lamentablemente no tenía.
Como conclusión me queda que realmente los tejidos necrosados emiten luz, actualmente estamos investigando con mis alumnos del club de ciencias Nicolás Tesla una leyenda urbana, la “luz mala”, logicamente desde el punto de vista puramente científico, localmente varios lugareños han visto estos fuegos fatuos y la idea es traer material de la zona (huesos y tierra) de donde se haya producido el fenómeno y tratarlas con distintos químicos midiendo la emisión de fotones en el recinto oscuro del PMT
Documentos consultados de interés:
los fuegos fatuos se relacionan con emisiones de metano y otros gases inflamables producto de la descomposición de cadáveres, especialmente en cementerios
ResponderEliminarBuenas noches César,
ResponderEliminar¡Este blog es genial!; excelentes ideas y de gran ayuda.
Pues me alegra que te guste.
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